En manos del destino coloque mis sueños
Adobados con esperanzas
Aguardando en la orilla del tiempo que actúe sin darse cuenta
Mientras que los días corren como caballos en las llanuras
Galopan sobre las nubes del horizonte los sueños de mis antepasados
Mis sueños aun permanecen dormidos
Esperando a ser exhortados por las calamidades del destino
Aguardan su lugar en el libro de la vida
Palabras vacías salen de vuestras boca a diario
Un sin sabor llega con el dulce olor que te acompaña por doquier
Mis ojos divisan la orilla entre la niebla
Pañuelos blancos batiéndose nos dan la bienvenida
Y tu mujer divina me esperabas desde aquel dia
MARDOQUEO
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